MAYO 2025

EL ARTE DEL BIENESTAR: Masaje Tailandés con aceites templados, una experiencia sensorial única

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Por Mónica Albarrán

Tiempo de lectura: 4 minutos

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El masaje tailandés ha sido durante siglos un pilar de la medicina tradicional en Tailandia. Reconocido por su combinación de estiramientos, presiones profundas y técnicas inspiradas en el yoga, esta práctica ancestral ha evolucionado a lo largo del tiempo, dando lugar a variantes más suaves y sensoriales. Una de las más populares actualmente es el masaje tailandés con aceites, que combina los beneficios del toque terapéutico con las propiedades curativas de los aceites esenciales.

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Una experiencia holística

A diferencia del masaje tailandés clásico, que se realiza en seco y sobre una colchoneta en el suelo, el masaje con aceites se aplica sobre una camilla, utilizando aceites templados que ayudan a calmar el sistema nervioso y relajar los músculos. La técnica se enfoca más en movimientos largos, fluidos y rítmicos, lo que lo convierte en una experiencia menos intensa pero profundamente relajante.

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Aceites esenciales: más que aroma

Lavanda, jazmín, eucalipto, lemongrass o coco son algunos de los aceites más utilizados en este tipo de masaje. Cada uno tiene propiedades particulares: la lavanda calma la ansiedad, el eucalipto descongestiona, el jengibre revitaliza, y el coco nutre profundamente la piel.

Los aceites se calientan previamente hasta alcanzar una temperatura ligeramente superior a la del cuerpo, lo que potencia su efecto relajante y mejora la absorción a través de la piel. El calor también favorece la dilatación de los poros, permitiendo una mayor penetración de los principios activos naturales.

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Beneficios físicos y emocionales

Entre los principales beneficios del masaje tailandés con aceites destacan:

• Reducción del estrés y la ansiedad

• Alivio de dolores musculares y tensiones

• Mejora de la circulación sanguínea y linfática

• Hidratación profunda de la piel

• Estimulación del sistema inmunológico

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Además, muchos terapeutas coinciden en que este tipo de masaje ayuda a reconectar con el cuerpo y fomentar el equilibrio entre mente y emociones.

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Tradición adaptada a los tiempos modernos

Si bien este masaje mantiene la filosofía del equilibrio energético propio de la medicina tailandesa, su adaptación con aceites lo hace más accesible para quienes prefieren una experiencia sensorial más suave y reconfortante. Por eso, cada vez más centros de bienestar, spas y hoteles lo incluyen en sus menús de tratamientos.

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En tiempos donde el estrés se ha convertido en una constante, el masaje tailandés con aceites representa una oportunidad para pausar, respirar y reconectar. Una tradición milenaria que, lejos de quedarse en el pasado, sigue renovándose para ofrecer bienestar en cuerpo y alma.

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